Inicio hoy una serie de posts antipáticos e inútiles, con los que no pretendo alcanzar objetivo alguno, a través de los cuales no voy a llegar a ninguna conclusión satisfactoria para nadie, que además no van a serviros para nada, y con los que me voy a enemistar con la mayor parte de la población con derecho a voto. Trataré de explicaros por qué ninguno de los partidos polÃticos que se presentan a las elecciones generales en mi circunscripción electoral (Madrid) merece en mi opinión el voto de ninguna persona sensata, razonablemente buena y que dependa de un escueto salario mensual para poder mantenerse. A pesar de ello, en un alocado ejercicio de contradicción aplicada, os explicaré también que soy partidaria de votar al partido menos malo. Imagino que ya calculáis a cuál me refiero, pero de todos modos os aclararé cuáles son las siglas afortunadas en los dÃas venideros.
Abundando en lo que he dicho antes, en general el panorama polÃtico español (legal) es desolador. Seguro que las hay, pero yo no conozco a ninguna persona que se ilusione con la idea de que las elecciones generales las gane un partido determinado. Todo lo más, la mayor parte de la gente con la que hablo tiene la esperanza de que éstos o los otros pierdan las elecciones. Como os decÃa en este artÃculo, aquà se vota mucho en contra. (No hablo de cómo es la cosa en otros paÃses porque no sabrÃa qué decir al respecto.)
Mucha gente de buena fe me dice que votará al PSOE para que el Partido Popular no gane las elecciones. Ya hablaré otro dÃa de los socialistas, pero centrándome hoy en el PP confieso que entiendo el miedo que provoca una posible victoria de los populares. Sin embargo, cuidado: eso es sólo una opinión que me temo que no es compartida por la mayorÃa de los posibles votantes.
Es cierto que cualquier partido que ofrezca propuestas radicales en su programa provoca algún rechazo entre gran parte de la población. Se dice muy frecuentemente que la mayor parte de la gente es conservadora, en el sentido lato de la palabra; es decir, que el grueso de los votantes son partidarios de que las cosas sigan como están, que las estructuras sociales vigentes se mantengan y que los valores en los que han sido educados se transmitan a las siguientes generaciones. Se tratarÃa de una aversión generalizada al cambio, tal vez de una fobia a la novedad, no sé. Muchos afirman que esa tendencia serÃa beneficiosa para el partido que se encuentre en el poder en el momento en que hay elecciones, en este caso para el PSOE. Sin embargo, no dejo de pensar que para el votante “conservador” las propuestas del PP podrÃan ser mucho más de su agrado que algunas de las decisiones que ha tomado el PSOE: el rechazo al matrimonio entre homosexuales y las propuestas para controlar a los inmigrantes y dificultar su integración en España, por ejemplo, no dejan de ser más de lo de siempre. El hecho es que no parece descabellado pensar que las propuestas electorales peperas estén siendo bien recibidas por millones de españoles. Dichas propuestas han sido elaboradas en buena medida por los ideólogos de la FAES y estructuradas por Juan Costa, coordinador del programa del PP, protegido de Rodrigo Rato, un hombre que ha dejado un ingratÃsimo recuerdo para los que lo sufrieron en los cargos públicos que ocupó gracias al último Gobierno de Aznar -ignoro qué pensarán de él en el FMI-, asà que no es de extrañar que resulten tan llamativas.
Cuanto más lo pienso, más me convenzo de que la apuesta del PP ha sido debidamente meditada por sus responsables, y que su interés es sin duda ganar las elecciones a fuerza de prometer a la mayorÃa del electorado lo que ellos creen que la mayorÃa del electorado quiere que le prometan. Ojalá hayan calculado mal, porque si tienen razón entonces la mayorÃa de los españoles votará a la ultraderecha, a los ricos, los caciques y los poderosos, en contra de los derechos de los desfavorecidos, los marginados, la mayor parte de los asalariados, y por supuesto a favor de las doctrinas católicas más fanáticas, con todo lo que ello supone. Votar al PP es también votar a la desfachatez y la prepotencia de sus dirigentes, gentes que -como Manuel Lamela, responsable de la ignominiosa campaña contra la sanidad pública madrileña- cometen auténticas barrabasadas prácticamente imposibles de remediar, y que nunca se arrepentirán de sus fechorÃas.
Además, votar al PP es darle el voto al capital español para que siga poseyendo España como hasta ahora, es desmontar la sanidad y la educación públicas, es encoger los recursos públicos, es abandonar toda esperanza de que el aborto sea libre y gratuito, es dar carta blanca a la xenofobia y el racismo oficiales, es ilegalizar partidos polÃticos, es en suma votar en contra de los intereses de la mayor parte de la gente que vive en España. Todo lo último también ocurre si se vota al PSOE. Pero de eso hablaré en otro mensaje.
11 comentarios ↓
Yo también espero que se equivoquen y España no sea como ellos creen, porque sino nos vamos a tener que exiliar.
Por si acaso, una razón más. Es superficial, pero a mi me vale. ¿No os parece que la mayorÃa de los elegibles del PP son personalmente muy desagradables?
Si no los votamos, quizá los veamos menos a menudo.
Me alegro que ya estés otra vez en la brecha. Un abrazo
Gracias, Izaam. Un abrazo para ti también.
Dices al principio que van a ser unos posts muy antipáticos. No sé, a mÃ, cuando has explicado de qué iban a ir, me han entrado muchas ganas de leerlos.
Y, sin embargo, me parece que, tratando hoy sobre el PP, te has quedado corta. Votar al PP debe de dar la sensación de que haya una trituradora en la urna en la que vas a meter la mano (sÃ, sÃ, vale, no sé… imaginémonos una ranura muy grande).
Venga, venga, vamos, que te has dejado la dinamita en casa.
Uy, si lo llego a saber, te envio antes este link para que decores tu artÃculo. Está muy bien , echale un ojo
http://www.flickr.com/photos/marianorajoi/
Yo no voy a votarles, pero lo que sà me gustarÃa es botarles de este paÃs, del mundo, del universo, pero me temo que tendremos PP y peperos para rato. No sé qué le pasa a los españoles, y sobre todo a los madrileños, ¿qué más tienen que hacer mal para irse?
En una cosa discrepo contigo, sà creo que hay algún partido en el panorama digno de nuestro voto. Espero a que hables de ellos, o de nosotros. Creo que es el mismo al que tú te refieres.
Hola Belenita, me alegro de volver a contactar contigo…
QuÃzás lo sepas ya o no, que me he apuntado a Eurovisión, je, je, je… en serio. En fin, que a la gente con la que tengo más confianza le pido el favor de que me hagan de club de fans, discográfica o agente de prensa según les apetezca. Pues eso, que a por ellos… je, je, je
OTRA EUROVISIÓN ES POSIBLE
VOTA POR CUTILLAS Y LOS AUTÓNOMOS y su canción “Tierra de nadie†en http://www.myspace.com/eurovision2008
Este año hay una pequeña posibilidad de que como representante de nuestro estado, no vaya una canción enlatada de las que se preparan exclusivamente para eurovisión y no aguanta ni un dÃa más. Puedes elegir entre quinientas.
Además, el hecho de que se pida la participación a los ciudadanos, siempre es un gesto de democracia que honra a los organizadores (ya podÃan otros tener este tipo de “detalles†vinculantes para cosas más importantes, ya).
Si encima votas la propuesta de CUTILLAS Y LOS AUTÓNOMOS “Tierra de nadie†nos das una alegrÃa, y si ayudas a que se difunda nuestra canción y que más gente nos vote, pues entonces te debemos una.
je, je, je… pero no es broma, en serio que vamos a ello… je, je, je
Hombre, claro que te voto, Jesús. Ahora mismo. Muchos éxitos y un beso grande.
Yo también te voto Jesús, y aprovecho para que se pa la concurrencia que no es por amiguete (que ya bastarÃa) sino porque serÃa por fin y una representación de calidad. Que ya va tocando.
Sois francamente buenos, asà que ya está bien de mierdas, ¡paso a la buena música!
Muy divertido el enlace, Izaam, me he reÃdo mucho.
De nada, sabÃa q lo ibas a apreciar
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